El Pleno de la Asamblea aprueba una propuesta del PSOE para promover la igualdad y combatir los discursos de odio hacia el colectivo LGTBI+
Ceuta contará próximamente con un plan integral contra la LGTBIfobia tras la aprobación este miércoles de una propuesta presentada por el Grupo Parlamentario Socialista. La iniciativa salió adelante con el respaldo del Partido Popular, MDyC y Ceuta Ya!, mientras que Vox fue el único grupo que votó en contra.
El objetivo del plan es reforzar la protección de los derechos del colectivo LGTBI+, promover la igualdad real y combatir la creciente ola de discursos de odio, discriminación y agresiones registradas en todo el país. El portavoz socialista, Manuel Hernández Guerrero, subrayó la necesidad de una respuesta institucional firme: “Ceuta no puede mirar hacia otro lado ante el odio y la discriminación; el silencio es una forma de complicidad”.
El documento contempla medidas en ámbitos como la educación, sanidad, empleo, servicios públicos y redes sociales. También incluye protocolos de atención, reparación y acompañamiento a víctimas, así como la participación activa de asociaciones LGTBIQ+. El plan hace especial hincapié en la atención a personas vulnerables, como migrantes residentes en el CETI que han sido víctimas de agresiones por razón de su orientación sexual o identidad de género.
La consejera de Sanidad y Servicios Sociales, Nabila Benzina, mostró su apoyo a la iniciativa, aunque advirtió que el presupuesto estimado por el PSOE, que ronda los 150.000 euros, deberá ser revisado desde un punto de vista técnico.
El debate estuvo marcado por tensiones previas entre Guerrero y la diputada de MDyC, Fátima Hamed. Esta última acusó al PSOE de tener una “doble vara de medir” en la lucha contra la discriminación, recordando que los socialistas votaron en contra de una propuesta para aprobar un plan contra la islamofobia. “Eso es incongruencia política”, afirmó Hamed, quien reiteró su repulsa hacia “todo tipo de odio y discriminación”.
Pese a las diferencias, el acuerdo alcanzado sienta las bases para un futuro en el que la diversidad sea reconocida como un valor social y protegido por las instituciones ceutíes.
