El incendio declarado en Zahara de los Atunes ha forzado la evacuación de unas 2.000 personas, entre vecinos y turistas, ante la rápida propagación de las llamas. La orden de salida urgente incluyó instrucciones a muchos afectados para que abandonaran la zona por la playa, debido al colapso de la carretera de acceso.
Las fuertes rachas de viento, que han complicado las labores de extinción, obligaron a desplegar un amplio operativo con 14 medios aéreos y más de 150 bomberos forestales trabajando sobre el terreno.
Si no se producen cambios en la dirección del viento, los residentes de la urbanización de Atlanterra podrán regresar a sus hogares este martes, según han informado las autoridades. Sin embargo, la evolución del fuego sigue dependiendo de las condiciones meteorológicas, que en las últimas horas han sido adversas para el control de las llamas.
