La organización vecinal denuncia la pasividad del Gobierno local y alerta de graves dificultades económicas para mantener el servicio
La Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos (FPAV) ha anunciado su decisión de dejar de gestionar las Brigadas Verdes a partir del próximo mes de junio. La entidad vecinal, que ha estado al frente de este servicio durante años mediante un convenio con la Ciudad Autónoma, justifica su renuncia en la “pasividad” del Gobierno municipal para cumplir su compromiso de integrar a los trabajadores en la estructura de la Administración local.
Según ha informado la FPAV en un comunicado, el Ejecutivo se comprometió en su momento a buscar una fórmula legal que permitiese el traspaso de los 117 trabajadores de las Brigadas Verdes a la estructura de la Ciudad. Sin embargo, este compromiso no se ha materializado. El comité de empresa propuso en su día la incorporación de la plantilla a Servilimpce, la nueva empresa pública de limpieza, una propuesta que fue rechazada por la Consejería de Fomento, Medio Ambiente y Servicios Urbanos.
Más recientemente, el consejero del área, Alejandro Ramírez, aseguró que el Gobierno continúa estudiando alternativas para asumir la gestión del personal, aunque descartó la creación de una nueva empresa municipal para tal fin.
“La situación actual es insostenible”, lamenta la FPAV, que denuncia haber sido víctima de “amenazas continuas e insultos”, además de acusar al Gobierno local de “falta de claridad” en los pagos mensuales de la subvención destinada al mantenimiento del servicio. Esta incertidumbre, añaden, dificulta la planificación financiera y el abono a proveedores.

La Federación también señala que la adhesión de los trabajadores al convenio laboral de jardinería ha supuesto un incremento notable de los costes. Además, recuerda que ha tenido que responder ante la Inspección de Trabajo por reclamaciones relacionadas con el abono de varios complementos recogidos en dicho convenio, cuyo sobrecoste cifra en más de 300.000 euros.
Por todo ello, la FPAV ha instado al Gobierno a crear de forma urgente un grupo de trabajo que asuma la gestión de las Brigadas Verdes y permita a la organización vecinal desligarse de lo que consideran una “tarea impuesta” que ya no pueden seguir gestionando.