En esta acción, que está incluida en el Plan de Formación Continua de la Ciudad para 2021, han participado también miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado
La Jefatura de Policía Local, dependiente de la Consejería de Sanidad, Consumo y Gobernación, ha llevado a cabo un curso de armamento y tiro policial, en el que han participado 20 agentes de la Policía Local, Policía Nacional y Guardia Civil, para perfeccionar aspectos tácticos del tiro policial, dotándoles de conocimientos avanzados del tiro práctico.
Este curso, que figura en el Plan de Formación Continúa de la Ciudad para 2021 y que ha sido impartido por la Unidad de Armamento y Tiro de la Policía Local, también ha actualizado a los asistentes la formación jurídico-teórica necesaria conforme a las normativas internacional, europea y española, sobre uso de armas de fuego a miembros de las Fuerzas de Seguridad en general y ha reforzado a los alumnos sus conocimientos en todo lo relacionado con el arma de fuego reglamentaria, su porte adecuado y el correcto manejo, uso y ostentación de la misma, todo ello adaptado a la realidad social positiva.
Los contenidos impartidos, se han distribuido en dos fases diferenciadas, una teórica, desarrollada en el aula de la Academia de Policía, mientras que las clases prácticas, se han realizado en campos de tiro de la Comandancia General de Ceuta, donde se han llevado a cabo ejercicios de tiro nivel individual y de binomio, tanto estáticos, como dinámicos, técnicas contraemboscada, con desarrollo de técnicas fuego/movimiento y tiro nocturno, donde se ha trabajado y perfeccionado el tiro en condiciones de visibilidad reducida, con luz fría y técnicas de utilización de linterna en escenarios de alto riesgo. En todos los ejercicios se ha realizado el juicio crítico posterior, finalizando el curso de perfeccionamiento con un examen final, donde se ha podido comprobar la conceptualización de conocimientos del alumnado.
La Jefatura de la Policía Local quiere agradecer el alto grado de implicación por parte de los agentes participantes y la consecución de los objetivos programados, cuya principal expectativa era que los alumnos alcanzasen un alto grado de capacitación y formación en el uso táctico del arma de fuego reglamentaria, aspecto muy necesario para poder garantizar la eficacia de los miembros de las Fuerzas de Seguridad del Estado.
