El nuevo tributo propuesto para compradores extracomunitarios genera dudas legales y podría tener un impacto más amplio del previsto
La nueva proposición de ley sobre vivienda impulsada por el PSOE ha despertado preocupación entre expertos fiscales e inmobiliarios, quienes advierten de que la medida podría tener consecuencias fiscales más amplias de lo previsto. En concreto, el proyecto plantea la creación de un nuevo tributo para la adquisición de vivienda por parte de compradores no residentes de la Unión Europea, pero su redacción ambigua está generando incertidumbre sobre su verdadero alcance.
Según varios especialistas consultados, el texto legal no define con claridad si este nuevo impuesto se aplicaría únicamente a los compradores extracomunitarios o si podría extenderse a otras operaciones inmobiliarias, afectando incluso a residentes y ciudadanos comunitarios. “La formulación actual es confusa y abre la puerta a interpretaciones que podrían encarecer cualquier transacción inmobiliaria, sin importar el perfil del comprador”, señalan fuentes del sector.
El objetivo declarado de la proposición es limitar la especulación inmobiliaria y frenar la adquisición masiva de viviendas por parte de inversores extranjeros, especialmente en zonas de alta demanda. Sin embargo, los expertos advierten que, de no corregirse la ambigüedad legal, podría derivar en un aumento generalizado de la presión fiscal sobre todo tipo de inmuebles.
Además, varios actores del sector temen que esta incertidumbre legal frene la inversión inmobiliaria y afecte al mercado de compraventa en un momento de desaceleración económica. Desde asociaciones de promotores hasta bufetes especializados en derecho tributario han pedido al Gobierno una redacción más precisa y un proceso de consulta con los actores implicados.
El PSOE aún no ha ofrecido una aclaración pública sobre los posibles efectos colaterales de la medida ni ha anunciado si está dispuesto a introducir modificaciones en el texto. La proposición continúa su trámite parlamentario y podría experimentar cambios antes de su aprobación final.
