El Gobierno ha aprobado la declaración de la histórica comisaría de la Policía Nacional en Vía Laietana, en Barcelona, como Lugar de Memoria Democrática. Esta medida, que busca reconocer los episodios de represión vividos durante el franquismo en dicho edificio, ha generado una fuerte polémica.
Desde el sindicato policial Jupol han mostrado su absoluto rechazo a la iniciativa y han exigido su revocación inmediata. En un comunicado, el sindicato acusa al Ejecutivo de “ceder ante las exigencias del independentismo” y utilizar esta decisión “para contentar a sus socios parlamentarios y desviar la atención de los graves escándalos de corrupción que afectan al Gobierno”.
La comisaría de Vía Laietana ha sido objeto de denuncias históricas por supuestos abusos cometidos durante la dictadura, y ha sido reivindicada durante años por asociaciones de memoria histórica y colectivos catalanistas como un símbolo de represión. Con esta declaración, se busca preservar su relevancia como testimonio de ese pasado, aunque el anuncio ha reavivado tensiones entre el Gobierno central y sectores policiales y de la oposición.
